Entrevista a Sofía Freire Dowbor, nieta del pedagogo Paulo Freire

"Nadie es naturalmente pobre, burro o inferior, todo es construcción cultural"

El presidente Jair Bolsonaro quiere sacarle a Paulo Freire su título de “patrono de la educación” brasileña

 

 

De visita en Sao Paulo, el presidente Jair Bolsonaro, habló de su intención de cambiar la denominación de "patrono de la educación" brasileña a Paulo Freire, título honorífico concedido al educador en el año 2012, mediante una ley. Sofía Freire Dowbor, nieta de Freire, declaró en comunicación con el Área de Prensa de la Regional Córdoba de Conciencia Solidaria ONG, su abrazo a todos los que resisten luchando mediante el sostenimiento de una educación crítica, capaz de cambiar la sociedad, que respete a los educandos, y el diálogo entre educador y educando. "Nosotros estamos pasando en Brasil, como mucha gente sabe, un proceso de desmonte, y de una invención de una serie de mentiras, con relación, específicamente también, al educador Paulo Freire", declaró para Caperucita Soja y el Oro Feroz, el pasado 3 de Mayo. Subrayó, además, la importancia que Paulo Freire se mantenga como patrono de la educación brasileña, "para nosotros es un homenaje simbólico muy importante, porque nos da fuerza en esta lucha, como una orientación para todos los pedagogos que están, también, haciendo revoluciones silenciosas, en el campo, practicando la educación popular y la resistencia, con todas nuestras comunidades". Resaltó su adhesión a las resistencias latinoamericanas, mediante una postura crítica, amorosa y de esperanza, frente a lo impuesto desde las clases dominantes.

En enero pasado, en La Semilla Rebelde, se pudieron profundizar muchos otros temas, comenzando con quién es Sofía Freire Dowbor: “Me llamo Sofía, vivo en San Pablo, Brasil, trabajo en investigación social, aprendo y enseño en el ámbito de lo que se llama ´Educación Popular´, donde trabajamos con la democracia participativa, con formas de empoderar a las personas y a las comunidades, para que puedan participar y transformar su entorno”, se presentó Sofía, y continuó: “por una casualidad genética, soy nieta del educador Paulo Freire, lo que automáticamente no tendría que llevarme a admirarlo, pero la realidad es que sí, comparto mucho de su forma de ser y de estar en el mundo, trabajo junto con su pedagogía amorosa, con su convicción, que la educación es un acto político, donde todos tenemos cosas para aprender y enseñar, y las reconocemos a través del diálogo horizontal con el otro. En este sentido, vengo actuando como activista popular, creo que la educación popular y crítica, es muy importante, en términos de emancipación para que podamos hacer trabajos en las villas, de forma que sea reivindicativa y transformadora”.
Periodista (P): Absolutamente de acuerdo con tu planteo, como vos decís, a pesar de la casualidad genética de ser la nieta de Paulo Freire, estás haciendo un trabajo que tiene que ver con lo que él plantó como semilla.
¿En dónde estuviste trabajando, aparte de Brasil, anduviste por otros lugares del mundo?
Sofía Freire Dowbor (SFD): Trabajé los últimos años en Barcelona, en lo que se llaman ´Comunidades de aprendizaje´, fue una experiencia muy interesante, que ahora se está implementando también en Brasil, y además he estado trabajando con la educación de adultos allí, y es muy interesante porque son escuelas que se abren al entorno, al barrio, entonces, la escuela no sólo es administradora de conocimiento, sino que se asocia a todos los actores que participan socialmente del barrio y es un proyecto pedagógico absolutamente horizontal en donde los estudiantes pueden soñar y elegir de qué manera y qué contenidos quieren trabajar.
P: Para pasar al tema que es la excusa de esta entrevista, a nivel panorama educativo, estuvimos trabajando programas pasados una entrevista tuya, donde mencionabas que Jair Bolsonaro, el actual presidente brasileño, quiere borrar el legado de Paulo Freire, tu abuelo. ¿Cómo ves el panorama educativo de Brasil?
SFD: Es muy complicado realmente, nosotros, en Latinoamérica, conocemos un poco esta realidad, nuestra educación hace tiempo que tiene un panorama bastante complicado, pero la perspectiva que se nos presenta, principalmente desde que hubo el golpe de Michelle Temer en 2016, y ahora con Bolsonaro, se profundiza más esa perspectiva neoliberal, con relación a muchos temas, y a la educación también, el panorama, la perspectiva, es bastante obscura. Tratándose básicamente de una lógica privatizadora de la educación, nosotros tenemos, por ejemplo, que las propuestas de Bolsonaro son poco claras, poco conexas con la temática de la educación, y a muchas otras. Pero hay algunos rasgos generales, para que la gente pueda tener una idea, por ejemplo, pretende congelar el presupuesto educativo, por más de 20 años, ampliar la enseñanza a distancia, a partir de los seis años de edad, y noten que, en su gobierno, hay muchos dueños de empresas de educación a distancia; entonces, el paquete se hace completo. Por otro lado, apoya una reforma de la base curricular común, que exige la enseñanza sólo de matemática y lengua. O sea, todo lo que es ciencias sociales, humanidades, ciencias naturales, va a dejar de ser obligatorio.
P: Todo lo que puede generar una conciencia crítica.
SFD: Exactamente, y de esto nosotros podemos percibir cuáles son las intenciones de su nuevo gobierno, se dice, que busca la educación neutral, pero en realidad está cargado de una ideología de mercado por detrás, y acabar con lo que es pensamiento crítico. Por lo tanto, eso se plasma, principalmente, en un proyecto de ley que se llama ´Escuelas sin partido´. Esa es como la principal bandera, ellos quieren implementarlo. La idea de la escuela sin partido es, principalmente, censurar el contenido que es discutido por los profesores en la clase, como cuestiones de género, cuestiones de derechos de minorías y, básicamente, acabar con el fomento al pensamiento crítico en general. Entonces, es super asustador donde entra el abuelo, dónde entra Paulo Freire, en eso. Bueno, estas personas han dibujado un cuadro para fundamentar estas propuestas, y el cuadro es el siguiente: ellos han elegido un enemigo, que es el marxismo cultural, así lo llaman. Entonces dicen y lo dijo Bolsonaro con sus propias palabras, el marxismo cultural ha dominado nuestras escuelas y es el principal responsable por las pésimas posiciones que tiene Brasil en los rankings internacionales de educación. ¿Y, de qué se trata esto? Es una idea que fue creada por políticos, por empresarios, por representantes religiosos que, a través de los medios masivos de comunicación, en Brasil tenemos medios de comunicación bastantes cuestionables, y a través de proyectos de ley, quieren sofocar pensamientos diferentes, quieren perseguir a aquellos que tienen posiciones políticas contrarias. El Ministro de Educación, Ricardo Vélez, un colombiano [destituido por Bolsonaro el 8 de abril de 2019], dice que hay que perseguir a aquellos que tienen ideas de izquierda. Por eso, fijate lo peligroso que es, empieza con la censura en las escuelas, al pensamiento que sea cuestionador y diferente, entonces, básicamente, tenemos un presidente, un ministro de educación, que no acepta la diversidad de opiniones. Es así de grave, y si nosotros no nos movilizamos, la actual gestión puede significar realmente el fin de la educación pública, y también quieren empezar a cobrar mensualidades en universidades públicas, y el fin de la libertad de expresión. Y cuál es la principal influencia, el principal enemigo, el que está detrás del marxismo cultural, en la educación brasileña para estas personas, es Paulo Freire. Están tergiversando totalmente el mensaje y el legado de este educador. Lo ponen como un adoctrinador marxista, el propio presidente dijo, hay que expulsarlos de las escuelas junto con toda la basura marxista, hay que acabar con el pensamiento crítico y construir más escuelas militares, también dijo, váyanse a Japón, si están preocupados por pensamiento crítico. Nosotros estamos realmente asustados aquí, estamos pensando y organizándonos para resistir, porque el panorama es realmente temible, para mí, como persona que está en la lucha, resistiendo, y cree en la transformación, me duele muchísimo, pero también, personalmente, como visceralmente me siento tocada por el hecho, también de relacionarse con mi abuelo, todo un legado que es de mi abuelo también.
P: Sofía, más allá de la base electoral que le permitió a Bolsonaro llegar a la presidencia, ¿hay una base de pueblo, también, que sabe los peligros que implica que este señor esté en la presidencia, y que se posiciona del lado de Paulo Freire, para enfrentarlo?
SFD: No fue la mayoría de la población brasileña quiénes lo han votado; si sumamos fotos a otras fuerzas y abstenciones, el 60% de la población brasileña no ha votado a Bolsonaro. Pero, de todas formas, es un porcentaje bastante grande. Nuestra principal dificultad, es realmente cómo unificarnos, cómo poder resistir, en esta lucha, a las “reformas”. Yo creo que son dos vías. La primera, no permitir que algunos cambios institucionales sean llevados a cabo, y la otra, un proceso que lleva tiempo, es un proceso de concientización de la gente, ha pasado lo que ha pasado, por una falta de presencia y de trabajo, en las villas, de la izquierda, y la Iglesia ha ocupado este espacio, y ha apoyado a Bolsonaro, además, hay mucha gente humilde, y nosotros no podemos criticarlos por eso, que siguen lo que dice la Iglesia, porque la Iglesia es el espacio donde la gente se siente alguien, se siente vista. Por lo tanto, es bastante delicado, para mí, hay que tener paciencia, por un lado, porque tenemos que entender que el cambio va a ser gradual, porque es necesario un cambio de conciencia, conjunto, horizontal, por eso la importancia de la educación popular, y, por otro lado, hay que estar en las calles, combatiendo todo lo que sea retroceso político-institucional, lo que sería más puntal.
P: Sofía, cuál es tu mensaje para el pueblo argentino, que te está escuchando ahora mismo, y a través de la grabación que difundamos más adelante.
SFD: Al pueblo argentino, primero decirles que he estado varias veces en Argentina, en las villas, les tengo muchísimo cariño, y acompaño también la lucha que se hace por allí, el mensaje que tengo es, también, para el pueblo brasileño y para Latinoamérica, es un mensaje que pasa por destacar la importancia del diálogo, por ejemplo, en Brasil, y yo veo que en Argentina también, estamos muy divididos en polarizaciones políticas, en enemistades, y tenemos que encontrar alternativas para recuperar el diálogo. Yo creo que es muy difícil avanzar, sino nos podemos comunicar desde el afecto, también, y en este sentido las practicas educativas populares que pueden ser rudimentarias, primoreadas en función en los contextos históricos específicos, creo que es una forma potente de comprendernos, de unirnos localmente, a través del empoderamiento local comunitario y en cuanto colectivo, Paulo Freire no habla de individuos, él habla de sujeto, él habla de colectivo, porque nosotros tenemos que hacernos responsables, los unos por los otros, y no irnos como el neoliberalismo nos lleva, por prácticas individualistas, consumir para tener, entonces, aumentar nuestra capacidad reivindicatoria y de transformación, pasa por relacionarnos con el otro en cuanto colectivo, eso tiene una potencia tremenda. Y una última cosa que quería decir, y es importante eso para mí, porque también Bolsonaro, y aquí muchos en Brasil, hablan de Paulo Freire como un adoctrinador, y él decía, seguirme es reinventarme, por eso, ahora más que nunca, creo que nos urge rescatar, recontextualizar el pensamiento de Paulo Freire, para que podamos emprender una acción cultural para la libertad, donde todos somos educadores, educadoras, tenemos algo que enseñar con todas las personas con quienes nos relacionamos. Todo esto es construcción de cultura, nadie es naturalmente pobre, nadie es naturalmente burro, nadie es naturalmente inferior, todo es una construcción cultural que puede ser transformada por hombres y por mujeres, en la vida a lo largo del tiempo.
P: Absolutamente, ninguno de los muchos teóricos y pedagogos que anduvieron por Latinoamérica, y que trataron de generar una alternativa, es menos adoctrinador que Paulo Freire. Es el más abierto de todos, es el que más oportunidades dio para la reinterpretación, justamente como estabas diciendo, y para la aplicación en cada contexto en particular, así que doctrina, en Freire, no hay.
SFD: No hay. No hay.
P: Muchísimas gracias, Sofía, muy clara tu exposición, te agradecemos y seguimos en contacto para cualquier otro momento. ¡Muchas Gracias!
SFD: Seguro, gracias a ustedes, y quisiera felicitarles por el trabajo de Conciencia Solidaria, y realmente un placer participar de La Semilla Rebelde. Estamos en contacto.
P: Muchísimas gracias, te mandamos un abrazo muy fuerte.

 

Escuchá la entrevista aquí.

 


 Lic. Matías Ruiz

+54 911 3331 8638
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La Semilla Rebelde

 

Un programa radial con etiqueta orgánica que Nadie podrá patentar.
Se emite todos los lunes de 18 a 19hs., por FM Una Radio Muchas Voces 98.1, de Capilla del Monte, Córdoba. Por internet: www.unaradio.org.ar
Conduce: Akénawak.

 

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