45 años: 24 de marzo de 2021
Día de la Memoria, por la Verdad y la Justicia
El 24 de marzo de 2021, a 45 años del último golpe militar en la Argentina, conmemoramos un nuevo Día de la Memoria por la Verdad y la Justicia.
Debido al contexto de pandemia actual, los organismos de Derechos Humanos, entre los que se encuentran Abuelas de Plaza de Mayo y Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, proponen una campaña que se denominada “Plantamos Memoria” que consiste en sembrar 30mil árboles por los 30.000 argentinos desaparecidos.
Memoria, Verdad, Justicia, ¿qué pasó el 24 de Marzo de 1976? Fue el comienzo de la última, y más sangrienta, de las dictaduras de nuestra historia reciente argentina. El sexto y último de los Golpes de Estado del Siglo XX: 1930, 1943, 1955, 1963, 1966, 1976, marcaron a sangre y fuego el pasado siglo, determinando quienes somos, formando la realidad actual.
La Dictadura de 1976 asumió el Poder Político para Implementar sin trabas un Modelo Económico, el Neoliberalismo que la dictadura de Onganía en 1966, había intentado implantar, sin lograrlo. El Modelo Neoliberal que, sin ataduras ni restricciones, avanza en la Argentina hasta nuestro presente, dejando de lado a los Trabajadores, a los Pueblos Originarios, a las Comunidades Campesinas, para beneficiar a los grandes inversores, principalmente a las Empresas Multinacionales extranjeras, que entraron, desde entonces y hasta hoy, a saquear nuestros mal llamados, “recursos naturales”; es correcto mencionarlos como: “bienes comunes”.
Pero la implantación y el desarrollo de este Modelo no fue gratuito: hubo que eliminar a la voz disidente, a aquellos que llamaron “subversivos”. Con la excusa de perseguir y derrotar a los grupos guerrilleros que, erróneamente, creían en la vía armada para el cambio social, la Triple A, durante el gobierno de Isabel Perón, y luego durante la dictadura, a través de todo el aparato estatal, secuestró, torturó, asesinó y desapareció a 30.000 hermanos, hijos, tíos, compañeros, amigos… A 30.000 argentinos.
4.000 guerrilleros quedaban vivos en la Argentina de 1976. A una centena de líderes, se los dejó escapar al extranjero. Y luego se procedió a obrar contra el Pueblo. Obreros, estudiantes, profesionales: Desaparecieron. Sus Madres, comenzaron una implacable y ejemplar búsqueda que continúa hasta hoy. Son las Madres de Plaza de Mayo. Entre los desaparecidos había mujeres embarazadas o con niños pequeños. Sus Abuelas quieren saber dónde están, quieren restituirles su identidad, quieren que conozcan su historia. Son las Abuelas de Plaza de Mayo, son los Hijos de los Desaparecidos. 120 conocen hoy su verdadera historia, su verdadera Identidad. Aproximadamente 400, esperan aún por ser encontrados. Las Abuelas envejecen, muchas partirán sin saber nunca qué fue de sus Hijos, dónde están sus nietos, y sin embargo siguen su lucha implacable y, principalmente, siempre: PACÍFICA.
El 2 de abril de 1982, cuando la dictadura ya contaba 6 años en el Poder, la credibilidad y el apoyo popular al gobierno venía en decadencia. A Galtieri, ocupante del sillón de Rivadavia, se le ocurrió que recuperar las Islas Malvinas, en manos inglesas desde 1833, lograría el apoyo popular que permitiría la continuidad de la Dictadura. Una causa justa, noble, recuperar el territorio de ultramar de las Islas Malvinas para el pueblo argentino, por el medio equivocado, por la guerra, el derramamiento de sangre y la destrucción. 649 argentinos murieron en las islas. Soldados conscriptos, esto significa que no eran militares de carrera, entrenados, preparados, eran jóvenes, casi adolescentes, 18, 19 años de edad, enviados a pelear una guerra, al frío, al hambre. Desde entonces hasta hoy, casi la misma cantidad de veteranos murió o se suicidó, no pudiendo superar las consecuencias internas de la Guerra. El desastre de Malvinas obligó a la dictadura a la recuperación democrática que el Pueblo Argentino ha sostenido.
Fuimos los primeros, y uno de los pocos, Pueblos Americanos que juzgó y condenó a sus dictadores. Y hoy, para cerrar este pequeño artículo, queremos citar el célebre alegato final del fiscal Julio César Strassera, en el Juicio a Las Juntas Miliares: “Señores jueces: quiero renunciar expresamente a toda pretensión de originalidad para cerrar esta requisitoria. Quiero utilizar una frase que no me pertenece, porque pertenece ya a todo el pueblo argentino. Señores jueces: Nunca más”.
Lic. Matías Ruíz,
Coordinador de la Campaña Nacional “NO al Fracking”.
Integrante del Área Prensa, Regional Córdoba.
+54 911 3331 8638
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